En el corazón del Parque Natural de la Serralada de Marina, junto al Mediterráneo a contados kilómetros de Barcelona, encontramos Alta Alella, el proyecto familiar de Josep Maria Pujol- Busquets Camps, su mujer, Cristina Guillén Soldevila y las sus dos hijas, Mireia y Georgina. Desde el inicio en 1991, la familia ha trabajado siempre la agricultura ecológica y se han recuperado viñedos de más de 65 años y variedades tradicionales como la Pansa Blanca (Xarel·lo) y la Mataró (Monastrell). Los viñedos, plantados en costeros y terrazas, están situados en las localidades de Alella, Teià y Tiana, cuna del cava de calidad desde principios del siglo XX.
La bodega fue pionera en la elaboración de cava sin sulfitos (desde la vendimia de 2006). En 2017, Vallcirera es reconocido como Paraje Calificado por el CR Cava (el único ecológico desde sus orígenes y situado en un parque natural), distinción y recompensa a un trabajo de muchos años elaborando cavas de alta calidad, con personalidad propia y ligados al territorio. En 2022 la DO Cava otorga a la bodega el sello de Elaborador Integral –garantía de trazabilidad y origen– y certifica el carácter diferencial del territorio Serra de Mar. Un reconocimiento a la zona vinícola de Alella por sus excepcionales y singulares características edáficas, climáticas, orográficas e históricas. Con esta nueva zonificación, se pone en valor la singularidad del territorio de Alta Alella.